Hola,
Me
animo a redactar el presente texto a manera de respuesta hacia la carta que Nueva
Acrópolis me dirigió con fecha del 15 de agosto de 2005 en la que se me invita
cordialmente a retomar mis clases en esa institución.
Quiero
decir ante todo que recuerdo con mucho cariño mi paso por Nueva Acrópolis donde
encontré siempre grandes amistades y quienes estuvieron conmigo en los momentos
más difíciles, rememoro siempre con especial afecto los eventos artísticos los
cuales presencié y en algunos casos participé, las conversaciones que se
suscitaban casi siempre después de clase, y donde discutíamos diversos temas
desde ciencia, humanidades hasta política. Aunque tengo que decir que siempre
se imponía el punto de vista del instructor.
No
obstante a pesar de ello era un espacio de discusión y compartir que con mucha
pena no he vuelto a encontrar en otros sitios. Quiero también reconocer que
gracias a Nueva Acrópolis descubrí antiguos manantiales de sabiduría que me han
ayudado mucho en mi propia existencia como lo es la filosofía estoica y Séneca en
donde encontré muchos elementos para darle algo de sentido a mi vida.
Sin
embargo a pesar de todo lo expuesto líneas arriba debo decirles que no creo que
sea posible mi retorno a Nueva Acrópolis por los siguientes motivos que a
continuación paso a describir y que espero que estos no sean motivo para un
resquebrajo de nuestra amistad sino mas bien una vía para acercarnos a la
búsqueda de la verdad.
1.
No creo posible mi retorno a Nueva Acrópolis porque discrepo profundamente con
su “filosofía”, ya que no concibo a una institución que se dice amante de la
sabiduría, buscadora de la verdad, que cree ciegamente en mitos esotéricos, que
supuestamente son regalo de los dioses para los hombres para ayudarnos en
nuestra evolución y en un futuro muy lejano luego de varias reencarnaciones,
finalmente alcanzar el nirvana.
¿Qué
escuela filosófica es esta que a sus adeptos les enseña mitos esotéricos –que
puede que sean ciertos– pero que se aceptan como cualquier dogma de fe, al más
puro estilo de cualquier secta o religión?
2.
No creo posible mi retorno a Nueva Acrópolis porque mientras estuve, noté un
claro sesgo de la filosofía que se enseñaba, hacia la de Platón, Plotino y ella
mezclada con Budismo y otras creencias orientales, lo que finalmente constituye
la filosofía Acropolitana y ya no había sitio para quienes se interesaban por
otras corrientes filosóficas que al igual que Platón también aman la sabiduría y
van en busca de la verdad.
Así
también mientras estuve casi nunca los instructores promovieron la discusión o
confrontación de ideas, siempre las enseñanzas fueron verticales sin espacio
para la reflexión, ni la motivación para ella.
3.
No comprendo la filosofía acropolitana, que al igual que otras sectas y
religiones también espera la próxima venida de un avatara o mesías.
4.
No comprendo la filosofía acropolitana que jamás se renueva así misma como
cualquier escuela de filosofía, sino que las enseñanzas de Platón, Plotino,
HPB, Jorge Angel Livraga son enseñanzas tomadas como verdaderas, ante lo cual
todo buen acropolitano tiene que hacer el acto de fe y repetirlas como un dogma
más de esa organización.
5.
¿Qué sustento científico, filosófico o evidencia práctica pueden mostrarse a lo
que se enseñan en algunas clases de Nueva Acrópolis como por ejemplo:
- Que la humanidad se
encuentra en el cuarto globo de la cuarta cadena, cursando su cuarta ronda,
habitando la expresión física de la tierra.
- Que anterior a la
humanidad existieron razas de gigantes y cíclopes como los lemures y los
atlantes que estuvieron tecnológicamente más avanzados, que dominaban la
energía del átomo y que podían enviar contra sus enemigos meteoritos del
espacio exterior.
- Que Manco Capac,
Zoroastro, Orfeo, Buda, Cristo, etc., fueron avataras (mesías) enviados por los
dioses para ayudar a la humanidad en su evolución.
- Etcétera.
6.
¿Dónde queda espacio en Nueva Acrópolis para los rebeldes, los librepensadores,
aquellos que buscan nuevas formas de interpretar y ver la vida, siendo sus
enseñanzas tan dogmáticas?
~ * ~
He
querido sintetizar en esta carta los principales puntos de mi discrepancia con Nueva
Acrópolis, dejando de lado algunas otras, pero son dudas o discrepancias para
mí muy profundas, que desde mi limitado punto de vista y conocimiento de la
filosofía he podido elaborar y expresárselos.
Tengo
el convencimiento que para cada pregunta mía habrá más de una respuesta desde
la filosofía acropolitana como anteriormente las hubieron, pero dichas
explicaciones al menos para mi nunca llegaron a satisfacerme por completo.
Me
despido reiterándoles nuevamente mi aprecio, cariño, agradecimiento y también
admiración por los que han escalado y ahora ocupan cargos importantes en la
institución, pero también espero sepan comprender y aceptar a alguien que a
pesar que piensa de una manera diferente a la de ustedes, los tiene en su más
alta estima.
(Fuente)
OBSERVACIONES
A
la pregunta ¿Qué sustento científico, filosófico o evidencia práctica puede
mostrarse de que la humanidad se encuentra actualmente en el cuarto globo de la cadena planetaria, cursando su cuarta ronda, habitando la expresión física de la tierra?
Los
instructores teosóficos explicaron que al final de cada ronda hay una extinción
inmensa que destruye prácticamente toda la vida que hay en la Tierra, y un siglo
después en la década de los 80s, los científicos descubrieron que efectivamente
ha habido varias extinciones súper masivas en el pasado.
A
la pregunta ¿Qué pruebas hay que anteriormente existieron razas de gigantes y
cíclopes como los lemures y los atlantes que estuvieron tecnológicamente más
avanzados, que dominaban la energía del átomo y que podían enviar contra sus
enemigos meteoritos del espacio exterior?
Una
posible prueba oidrían ser los inmensos bloques tallados de piedra que se han
encontrado en diversas partes de la tierra, los cuales todavía son un misterio de
cómo pudieron ser construidos y desplazados.
Pero
hay que tomar con mucha cautela todo lo que se dice sobre esas antiguas
civilizaciones porque por ejemplo: los cíclopes solo fue una deformación que se
produjo en algunos individuos, en ciertos aspectos los atlantes fueron más
avanzados que nosotros pero en otros aspectos no, y en ninguna parte de la enseñanza teosófica se
menciona que los lemures y los atlantes podían proyectar contra sus enemigos
meteoritos del espacio exterior. Lo cual yo sospecho ha de haber sido inventado
por Jorge Livraga, el fundador de Nueva Acrópolis.
A
la pregunta ¿Qué pruebas hay de que Manco Capac, Zoroastro, Orfeo, Buda, Cristo,
etc., fueron avataras?
Los
avataras producen una gran renovación espiritual en grandes porciones de la
humanidad y esto se ha percibido por las religiones que han surgido a partir de
ellos (pero las cuales desafortunadamente se degradan rápidamente, y es por eso
que los avataras tienen que venir cíclicamente para reavivar la flama de la
espiritualidad).
Pero
también hay que precisar que no todos los personajes que señala Nueva Acrópolis
son avatares y ahí una vez más yo sospecho que esa escuela está inventando
partes de su enseñanza.
Y
concuerdo completamente que la enseñanza acropolitana está totalmente sesgada
hacia sus propios intereses, impidiendo así que haya una verdadera libertad de
pensamiento en esa institución, por lo que los verdaderos partidarios de la
filosofía no se van a sentir a gusto en esa organización como es el caso de la
persona que escribió la carta que les puse arriba.